Durante la segunda semana de marzo, estalló una crisis bancaria global que traerá múltiples consecuencias en la actividad económica.

De acuerdo con expertos, existen dos consecuencias inmediatas posibles: i) El aumento de las probabilidades de una recesión en Estados Unidos en los próximos 12 meses, y un fuerte efecto en la segunda economía más grande del mundo, China; y ii) El aumento de las restricciones en las condiciones crediticias.

Con respecto a la seguridad de los depósitos bancarios, debe tenerse en cuenta que las cuentas inferiores a USD$250,000 en un banco de EE. UU. asegurado por la FDIC, se encuentran aseguradas y los países europeos cuentan con programas similares por montos que rondan los €100,000.

Los hechos más destacados hasta el momento, incluyen:

• El 10 de marzo, la Corporación Federal de Seguros de Depósitos (FDIC) del gobierno de Estados Unidos, tomó el control de SVB debido a que el banco sufrió una pérdida multimillonaria al cobrar bonos del gobierno de EE. UU. para recaudar dinero para pagar a los depositantes.
• El 12 de marzo, la FDIC cerró Signature Bank después de una corrida en sus depósitos por parte de clientes que estaban asustados.
• El 15 de marzo, las autoridades suizas anunciaron un respaldo para Credit Suisse, el segundo banco más grande en ese país.
• El 16 de marzo la secretaria del Tesoro de EE. UU., Janet Yellen, y Jamie Dimon, director ejecutivo del banco más grande de Estados Unidos, diseñaron planes para un rescate del sector privado.
• El 19 de marzo el banco más grande de Suiza, UBS, acordó comprar su rival en crisis Credit Suisse en un acuerdo de rescate de emergencia destinado a detener el pánico del mercado financiero.

El costo del rescate hasta el momento es de más de $400 mil millones de dólares en apoyo directo y será necesario estar atentos al desempeño global de la banca.