El Departamento de Estado de Estados Unidos emitió una alerta de «Precaución Mundial» dirigida a todos sus ciudadanos, en la que advierte sobre la posibilidad de interrupciones en los viajes internacionales, así como protestas y movilizaciones que podrían poner en riesgo a personas e intereses estadounidenses en diversas partes del mundo. Esta medida surge tras los recientes bombardeos de las fuerzas estadounidenses contra instalaciones nucleares en Irán, una acción que ha intensificado la crisis en Oriente Medio. Según el comunicado oficial, el conflicto entre Israel e Irán ha derivado en cierres temporales del espacio aéreo regional, lo que afecta el tráfico aéreo comercial y la estabilidad de múltiples países. La emisión de alertas de este tipo por parte del gobierno estadounidense es poco común; la última se produjo en octubre de 2023, tras los ataques de Hamás contra Israel desde la Franja de Gaza.

La comunidad internacional ha manifestado una profunda preocupación por el agravamiento del conflicto. China condenó enérgicamente los ataques y acusa a Estados Unidos de violar los principios fundamentales de la Carta de las Naciones Unidas y el derecho internacional. Además, denunció que estas acciones incrementan la inestabilidad regional. A su vez, el gobierno iraní ha anunciado que responderá a los bombardeos en el momento, escala y forma que determinen sus fuerzas armadas. En una sesión de emergencia del Consejo de Seguridad de la ONU, el embajador iraní advirtió sobre las consecuencias de la intervención militar estadounidense. Por su parte, el expresidente Donald Trump confirmó que los ataques alcanzaron tres sitios nucleares estratégicos en Irán y amenazó con nuevas ofensivas si Teherán no cesa sus actividades. En este contexto, el secretario de Estado, Marco Rubio, instó a China a intervenir diplomáticamente para disuadir a Irán de cerrar el Estrecho de Ormuz, paso crucial para la circulación de cerca del 20 % del petróleo mundial.

Fuente: El Financiero.