Estados Unidos anunció la suspensión temporal de la importación terrestre de ganado procedente de México, tras detectar un avance preocupante del gusano barrenador (cochliomya hominivorax), una plaga que desde noviembre de 2024 afecta al ganado en el sur del país latinoamericano. La medida fue dada a conocer por la secretaria de Agricultura estadounidense, Brooke Rollins, quien subrayó el riesgo sanitario y económico de permitir la entrada del ganado infectado. «La última vez que esta devastadora plaga invadió Estados Unidos, nuestra industria tardó 30 años en recuperarse. Esto no puede volver a ocurrir», declaró. La restricción incluye al ganado vacuno, equino y a los bisontes, y tendrá una duración inicial de dos semanas, aunque su extensión dependerá de la evolución del brote en México.

La decisión ha causado molestia en el gobierno mexicano. El secretario de Agricultura, Julio Berdegué, calificó la medida como «unilateral» y contraria a los acuerdos alcanzados recientemente con su contraparte estadounidense en Washington. En declaraciones difundidas en redes sociales, Berdegué lamentó que esta acción se tomara justo después de una reunión en la que ambas partes se comprometieron a fortalecer los mecanismos de diálogo y cooperación en temas sanitarios. Aunque posteriormente moderó su postura, reiteró que México no está de acuerdo con la suspensión y expresó su confianza en lograr un acuerdo que permita reanudar las exportaciones a la brevedad. La industria ganadera mexicana, que genera más de 1.000 millones de dólares anuales en exportaciones a Estados Unidos, enfrenta ahora una situación crítica, agravada por los primeros casos humanos de miasis detectados en regiones del sur mexicano.

Fuente: El País.